La incógnita rodea a los Reyes en su compromiso privado más tradicional del año
No cabe duda de que el 6 de enero es uno de los días más especiales del calendario para los Reyes. Año tras año, don Felipe y doña Letizia dan el pistoletazo de salida a sus agendas con su aparición en la Pascua Militar para posteriormente disfrutar de un plan de lo más privado y familiar en compañía de Jesús Ortiz. Y es que se había convertido en tradición ver al Monarca y a la consorte en compañía de sus hijas poniendo rumbo al domicilio del padre de la Reina para degustar el roscón propio de la fecha y proceder al intercambio de regalos.
Los Reyes y sus hijas acudiendo al domicilio de Jesús Ortiz en 2021 / Gtres
Pero toda costumbre tiene su punto y aparte y eso mismo es lo que ha ocurrido con respecto a esta típica merienda de Reyes. Lo normal habría sido ver a don Felipe, a doña Letizia y a sus hijas por los aledaños de la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón a eso de las cinco de la tarde, aunque la realidad ha sido otra muy distinta. Un nutrido grupo de periodistas aguardaba la llegada del soberano y su esposa en la puerta de la casa de Jesús Ortiz, aunque en esta ocasión ya a primera hora de la tarde comenzaron a percatarse de que algo no iba como en el resto de años. Comunicadores allí presentes nos han asegurado que es normal ver al equipo de seguridad de la Casa Real adelantándose aproximadamente una hora a la llegada de Sus Majestades para hacer un rastreo de la zona y que no haya ningún tipo de problema. Pero lo cierto es que durante esta tarde no ha habido ni rastro de los escoltas antes de la hora común de llegada de la Familia Real. Por si fuera poco, según relataban los reporteros, algunos de los vecinos de la urbanización de Ortiz aseguraron a su salida del domicilio no haber visto luz en casa del padre de la Reina, así que todo apuntaba a que Jesús también se había ausentado de la que es su casa.
Los Reyes en la Pascua Militar / Gtres
Esta gran ausencia no solo ha pillado por sorpresa a los medios de comunicación. Como cada año, un grupo de niños se reunían para pasar la tarde del día de Reyes esperando que se produjera la llegada del monarca, su esposa y sus hijas. Una tradición que este año se ha visto truncada ya que han ido pasando los minutos y Sus Majestades no han aparecido en la que iba a ser su primera toma del roscón junto a Jesús sin la compañía de Leonor. Fue ayer mismo cuando la Princesa puso rumbo a Gales para asistir a las clases del internado UWC Atlantic Collage, las cuales se han iniciado hoy mismo. Una vuelta a la rutina que se esperaba también que supusiera una ruptura con la costumbre de la merienda en casa de su abuelo, aunque a juzgar por lo ocurrido el resto de sus familiares tampoco habrían llevado a cabo el que era el plan favorito de Doña Letizia.
Pero, ¿a qué se debe este giro en los acontecimientos? Ni la aparición de la pandemia había conseguido que la Familia Real se desvinculara de su plan en este día tan especial, aunque la irrupción de la variante ómicron y su alta tasa de contagio puede que haya sido una de las causantes de que finalmente tanto Jesús Ortiz como los Reyes hayan cancelado su gran cita. Otra opción a tener en cuenta sería la segunda maternidad de Telma Ortiz, por la cual existe la probabilidad de que tanto Sus Majestades como el abuelo de la Princesa hayan cambiado su hoja de ruta para acudir al domicilio de la hermana de la Reina en un intento de que el recién nacido tenga el mínimo contacto con la calle y con un posible contagio por Covid.
Los Reyes y sus hijas acudiendo al domicilio de Jesús Ortiz en 2020 / Gtres
Sea como sea, lo cierto es que esta ausencia ha causado una gran sorpresa en el panorama nacional. Más aún cuando hace tan solo unas horas era el propio Jesús Ortiz quien utilizaba sus redes sociales para dar algunas pistas sobre cuál es el roscón que más le gusta a él, y por tanto, el que se convertía en el firme candidato para la degustación del 6 de enero en familia. El padre de la consorte dejó claro que la mejor elección era “el roscón sin nada”, dejando entrever que prefiere este dulce sin ningún tipo de relleno y más aún si está elaborado en la panadería Panem. ¿Habrán degustado el dulce bajo otro escenario, o habrán dejado la tradición para cuando la situación sanitaria sea favorable?